Mi desierto.
En el desierto habían cosas tremendamente reconfortantes, casi medicinales, la primera gota de roció de la madrugada, el rojo de las cochinillas de la tierra, las primeras tunas de la primavera, es como aferrarse a dar vida, la vida es energía y la energía es preciosa, es tuya.
[Fragmento y ejercicio escritura creativa]
Fotografía Jerécuaro Guanajuato, Mx.